Exactamente a la medianoche
del 25 de enero de 1994, el coche 8 de la línea K de Trolebuses a cargo del
conductor Elio Cristian Mercado, comenzaba a escribir el renacimiento de la
única línea de Trolebuses que había quedado en la ciudad, luego de una privatización
devastadora.
El primer conductor que reinauguró la línea, Elio Cristian Mercado, quien aún se desempeña después de veinticinco años.
Ahora en 2019, gran parte del
personal inicial de la línea, también cumple su cuarto de siglo en sus
ocupaciones, lo cual lo coloca en artífice fundamental de este camino
recorrido, y es justo que –aunque la prestación inicial correspondió a otra
firma- la actual conducción empresaria brinde un honroso reconocimiento por
estas Bodas de Oro.
Primer boleto expendido por la concesionaria U.T.E. CAPSE S.A. - E.T.A. Molino Blanco S.R.L., también conocida como Ecobús.
También cumple veinticinco
años de uso la flota original de esta etapa, integrada por veinte trolebuses
Volvo – Marcopolo – Powertronics, fabricados en 1987 originalmente para la
ciudad de Belo Horizonte, pero recién estrenados aquél 25 de enero de 1994.
Originalmente los vehículos
presentaron diversos problemas electrónicos, pero gracias al personal local,
fueron atenuados y en muchos casos, eliminados. No está en discusión la calidad
de la flota paulista: de veinte unidades, sólo una está radiada, (un 5%); y
ello no es común, en absoluto. Tampoco es natural encontrar trolebuses con
veinticinco años de uso.
Durante 2017 y 2018, el
personal de la empresa SEMTUR Trolebuses efectuó la renovación total de la
infraestructura, reponiendo morsetería desgastada, reparando columnas y
renovando (y agregando) subestaciones rectificadoras. También se cambió el hilo
de contacto de cobre en gran parte de la línea. Todas estas labores fueron
ejecutadas por personal propio, lo cual representó un importante ahorro
respecto de lo que hubiese insumido la tercerización de los trabajos.
En tanto, se amplió la
superficie cubierta de la Estación Nicaragua (Brasil 1036) permitiendo la
guarda y mantenimiento de la flota rusa arribada en 2017 para la línea Q.
TIEMPO DE DECISIONES
Tras veinticinco años de
fatigoso trajinar, los trolebuses brasileños deben dejar paso a nuevas
unidades. Pese a los esfuerzos del personal y a que la empresa no escatima
recursos, las unidades presentan deterioro, dejaron de ser confiables, y la
reparación estética de hace algunos años, no ha tenido gratos resultados.
Tampoco pudieron ser eficaces los equipos de aire acondicionado, que por
diversos motivos de orden eléctrico, no funcionan.
Por otra parte, el nuevo sistema
de transporte que intenta imponer la Municipalidad de Rosario, exige
accesibilidad a personas con movilidad reducida y aire acondicionado: algo que
los venerables “Marcopolo” no están en condiciones de cumplir.
Desde hace años, la Municipalidad
estudia alternativas para recambiar las unidades: se tuvo ofertas de la firma
BKM de Bielorrusia, pero con nulos resultados. También se tuvo en cuenta la
fabricación local de trolebuses con destino a la provincia de Mendoza, pero no
resultaron aptas para el uso rosarino.
Finalmente en 2017 se
incorporaron doce unidades modernas de fabricación rusa para la línea Q, pero
las mismas vienen presentando un deterioro creciente a menos de dos años de su
puesta en servicio, lo cual es un preocupante tema que excede el propósito de
este artículo. Pero concretamente, la opción de Rusia no es considerable para
la renovación de la K, tras el pobre desempeño en la Q.
Sería un despropósito que
luego de haber renovado las instalaciones fijas, siga dilatándose la decisión
de adquirir trolebuses nuevos o usados, pero que sirvan para ajustarse a las
necesidades de nuestros tiempos. En ese
sentido, el Gobierno de la Provincia de Santa Fe, que posee una Secretaría de
Estado de Energía, debería colaborar en la asistencia económica a la
Municipalidad de Rosario para poder proceder a dar la respuesta ecológica
moderna concreta. Se ha avanzado en inversiones en parques fotovoltaicos que
inyectan electricidad a la red pública de distribución, el desarrollo del biodiesel
y las pruebas con un prototipo de un colectivo modificado para funcionar con
asistencia hidráulica. Una acción contundente
sería la asistencia para poder tener troles nuevos en la Línea K.
Moderno trolebús articulado de fabricación suiza, con autonomía y carga dinámica. Vehículos de estas características son necesarios para renovar la línea K.
Harto conocido es que el
corredor Este-Oeste es uno de los más rentables y de mayor raigambre en la población
de Rosario. Lo sensato pues, es cuidarlo e invertir en él, para hacerlo cada
vez más eficiente. La Señora Intendenta tiene que definir esta situación, ya
que de hacerlo, sería un magnífico broche de oro en materia de transporte luego
de sus dos mandatos.
Los testimonios fílmicos de la inauguración en 1994, en el siguiente enlace: https://www.youtube.com/watch?v=bMg_i1AzsEY
Los testimonios fílmicos de la inauguración en 1994, en el siguiente enlace: https://www.youtube.com/watch?v=bMg_i1AzsEY